Ganymede

Eau de Parfum (amaderado, cuero). B683 y Ganymede dos palabras enigmáticas, dos fragmentos del universo que cuentan en unas pocas letras las inspiraciones y las aspiraciones de dos creadores, el perfumista Quentin Bisch y el modisto Marc-Antoine Barrois. Lanzado en 2016, el primer perfume de la Maison Marc-Antoine Barrois, B683, fue una invitación a descubrir el mundo creativo del modisto en su planeta imaginario. Elegancia auténtica, huella de recuerdos que evocan la suavidad y densidad del cuero, un buen maletín o una almohadilla de pátina, aromas calientes y acogedoras casas boscosas o paseos familiares en el bosque. Para esta nueva obra, el destino está en otra parte. Creando un acorde elegante e inesperado en torno a un cuarteto de mandarinas, violetas,flor inmortal y ciervos, los dos cómplices han soñado con esta estrella descubierta por Galileo en 1610. Reuniéndose alrededor de Júpiter, Ganimedes es un planeta rocoso, luminoso, sumergido en océanos de agua salada, nombrado así con referencia al joven héroe de la mitología griega que fue secuestrado por los dioses subyugados por su belleza hasta el punto de concederle la inmortalidad.

Compuesto por el perfumista Quentin Bisch, Ganymede se hace cargo de las notas de gamuza que hicieron del B683 un hermoso clásico. Pero esta vez alteran los códigos tradicionales para llevarnos a otro lado, hacia la elegancia, brillante y fluida. Se ablandan, ganan peso y suavidad táctil en contacto con la violeta mientras que la mandarina aporta su vivacidad plena y ácida dando tono y  verticalidad a la fragancia.  En contraposición la nota de flor inmortal levanta el acorde.  Con facetas a veces minerales a veces saladas, toda la composición juega sobre contrastes y oposiciones. Las notas componen un diálogo permanente que dibuja una nueva carta olfativa sobre la piel, como el reverso de una chaqueta de cashmere si Ganymede necesitara una imagen, sería cuatro puntos cardinales: Al norte, tendríamos vivacidad. Mandarina sabrosa a la que responde la flor al Sur inmortal y, para enfatizar la estructura olfativa, la densidad las notas de cuero y ante en el oeste se equilibran con la delicadeza de la flor de violeta en el este. Cuatro puntos para una escapada en perfume hacia un nuevo imaginario y otros códigos de elegancia.