Sophia Grojsman

Sophia Grojsman - Nariz | Le Secret du Marais

El arte de la perfumería tiene sus épocas y sus titanes. Podemos discutir sobre tensiones sociales o gustos generacionales, pero siempre hay grandes artistas que sacuden las tradiciones y abren nuevas puertas a sus contemporáneos.
Estamos hablando de Sophia Grojsman, una de las Titánides. Todo el mundo conoce sus perfumes. Algúnos de ellos son símbolos de generaciones y evocan muchos deseos en nosotros: Tresor de Lancome, Eternity de Calvin Klein, White Linen de Estee Lauder...
Sophia Grojsman es una las perfumistas actuales más famosa, y ha recibido los más altos honores de la industria: en 1998 recibió el premio Cosmetic Executive Women's (CEW) Achiever Award por su contribución a la perfumería, en 1996 fué honrada por la Sociedad Americana de Perfumistas con el premio Leyenda Viva, y de nuevo homenajeada en 1999 por la industria de la belleza CEW por sus logros de toda la vida en la industria de la fragancia.
Sophia Grojsman nació en Polonia, en una pequeña cuidad llamada Belarús. Recuerda que de niña prefería oler las rosas y los jazmines en el jardín de la casa a jugar con sus juguetes. Tras terminar sus estudios de química emigró a Nueva York y se unió a los laboratorios del IFF, donde aprendió de Ernest Shiftan, uno de los más grandes perfumistas americanos de la historia. Fue la primera perfumista en invertir las proporciones clásicas de perfumes. Sophia Grojsman es también famosa por su fascinación por las rosas, que utiliza en la mayoría de sus creaciones. A petición de Frédéric Malle, se acercó por primera vez en el arte de las velas perfumadas creando Russian Nights.

Outrageous 100 ml
Editions de Parfums Frederic Malle

Outrageous

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